Víctor Olarte es monitor de la Red de Huertos Escolares Ecológicos del Bajo Aragón y Matarraña, una iniciativa fomentada por Omezyma que este curso académico llega a su tercera edición. El objetivo es que los alumnos aprendan a sembrar, abonar y cuidar de verduras y hortalizas, así como discernir cuáles son de invierno (borraja, acelga) o cuáles de verano (lechuga, tomate, berenjena).
¿Cuáles son los objetivos que persigue esta iniciativa?
Que los niños se familiaricen con las plantas y sepan cómo se cultivan. Conocen que necesitan un tiempo y unos cuidados, que no es inmediato su crecimiento. Obtienen éxitos y fracasos, y aprenden a asimilarlos.
Esto tiene que servir para que consuman verduras sin rechistar.
Se están animando a consumir vegetales y hortalizas por el hecho de que ellos mismos los están cultivando. Es muy positivo que coman de todo, también espinacas y acelgas.
Los alumnos de la escuela rural estarán ya familiarizados con el mundo de la agricultura, es lo que ven en casa.
Sí, esto se nota bastante. Lo que sí están aprendiendo es a temporizar las verduras. Piensan que todo está disponible todo el año, y no es así, porque hay plantas que solo crecen en invierno y otras en verano.
Tienen a los chicos de Puigmoreno con un huerto en una jardinera.
Si hay voluntad, no disponer de instalaciones adecuadas no es inconveniente. En otros colegios están haciendo huertos en cajas de frutas.
No utilizan plaguicidas, tendrán insectos.
No los utilizamos porque son menores y no pueden estar expuestos a ellos. Tenemos un hotel de insectos para controlar biológicamente las plagas (a modo de refugio para mariquitas, tijeretas o mantis). También tenemos plantas aromáticas que actúan como barreras.
Intentan motivar a los escolares con premios
http://www.diariodeteruel.net/la-ultima/31061-los-ninos-se-animan-a-consumir-verduras-porque-ellos-mismos-las-cultivan.html
29/4/13
24/4/13
Texto y Naturaleza.
Los libros y las flores volvieron a tomar en la jornada de ayer, Día
de aragón, la plaza del Torico. Hacía una década que los libreros no
exponían en la emblemática plaza turolense. Además, los viandantes que
pasaban por la plaza del Torico tuvieron la oportunidad de confeccionar
una bandera bicolor, rojo y amarillo, con flores.
La festividad de San Jorge en la capital vino marcada en la mañana de ayer por los libros y las flores, que volvieron a tomar la plaza del Torico. El comerciante David Sánchez recordó que desde hacía una década no se ponían puestos de libros y flores en la plaza del Torico para festejar a San Jorge. El gerente del Centro Comercial Abierto, Rodolfo Pangua, comentó que la celebración del Día del Libro y de la Rosa había sido posible gracias a la voluntad de ocho comerciantes del centro histórico y uno del Ensanche, que junto con el apoyo del Ayuntamiento de la capital habían decidido sacar los libros y las flores a la calle.
http://www.diariodeteruel.net/teruel/31027-los-libros-y-las-flores-vuelven-a-tomar-la-plaza-del-torico.html
La festividad de San Jorge en la capital vino marcada en la mañana de ayer por los libros y las flores, que volvieron a tomar la plaza del Torico. El comerciante David Sánchez recordó que desde hacía una década no se ponían puestos de libros y flores en la plaza del Torico para festejar a San Jorge. El gerente del Centro Comercial Abierto, Rodolfo Pangua, comentó que la celebración del Día del Libro y de la Rosa había sido posible gracias a la voluntad de ocho comerciantes del centro histórico y uno del Ensanche, que junto con el apoyo del Ayuntamiento de la capital habían decidido sacar los libros y las flores a la calle.
http://www.diariodeteruel.net/teruel/31027-los-libros-y-las-flores-vuelven-a-tomar-la-plaza-del-torico.html
10/4/13
José Luis Sampedro
Hoy se multiplican las voces de reconocimiento a José Luis Sampedro
al conocerse la noticia de su muerte. Como director del departamento de
Economía Internacional y Desarrollo de la Universidad Complutense que él
creó junto al también fallecido y querido Manuel Varela Parache, quiero
sumarme a este agradecido recuerdo, haciendo memoria de su faceta
docente que resulta menos conocida para el conjunto de la sociedad, que
la del brillante literato o el pensador crítico del vigente orden
económico y político.
José Luis Sampedro fue pionero en la universidad española en la formulación y defensa del enfoque estructural para análisis económico. Una perspectiva de estudio de la realidad que subraya la existencia de profundos condicionantes técnicos y sociales que modulan el comportamiento de unos actores económicos reales que no operan como sugieren los manuales convencionales de economía. La existencia de rupturas y conflictos, de intereses e ideas contrapuestas, de grupos y clases sociales, de posiciones de mercado heterogéneas, de un acceso diferenciado al progreso técnico o de mediaciones políticas e institucionales que influyen en la actuación de todos los actores (empresarios, trabajadores ahorradores y consumidores) convierten a la economía "realmente existente" en una realidad social compleja y dinámica que la perspectiva estructuralista promovida por nuestro primer catedrático intenta captar en su integridad.
A Sampedro le gustaba autocalificarse como metaeconomista porque, como indicó en su memoria de oposición a cátedra y repitió en la memorable lección magistral que impartió con motivo de su jubilación: "Me dediqué a repasar la historia de la teoría económica y especialmente la obra de los "disidentes": los históricos, los institucionalistas, el marxismo, incluso los estructuralistas franceses que estaban entonces más de moda de lo que a mi juicio merecían". No es de extrañar que sus clases tuvieran el "sabor a realidad" y "sensibilidad humanista" propio de los autores clásicos de la economía política.
De ahí que su visión de la economía tuviera tres rasgos distintivos que no deberíamos perder quienes nos dedicamos a su docencia: el espíritu crítico, la visión amplia y la pasión por lo humano. No había en sus explicaciones cabida para la ingenuidad, el sectarismo ideológico o la asepsia tecnocrática. Pues si merece la pena estudiar economía no es para encontrar los mecanismos y tretas más astutos para enriquecerse a costa de los demás -lo que conduce al desastre colectivo como la crisis actual no deja de recordarnos-, sino para encontrar caminos que permitan a todos los seres humanos satisfacer adecuadamente sus necesidades básicas de un modo equitativo. A este respecto, José Luis Sampedro solía señalar con ironía que la Ciencia Económica había tomado un derrotero equivocado al haberse construido a partir del famoso libro de Adam Smith que -en su versión abreviada- se denomina La Riqueza de las Naciones, en lugar de haber partido de otro que se titulara hipotéticamente Investigación sobre la naturaleza y causa de la Pobreza de las Naciones y cómo superarla, dado que la pobreza es un problema mucho más serio y, por supuesto, más extendido que la riqueza.
Si he incorporado en el título este breve escrito de homenaje el neologismo transprofesor aunque él no lo utilizara nunca es porque también su magisterio fue más allá de lo ordinario. Y no porque creara un grupo de discípulos definido y llevara a cabo una estrategia tendente a ampliar su influencia académica o doctrinal -algo que no iba con su espíritu quijotesco-, sino porque su talante humano e intelectual inspiró, en el mejor de los sentidos, a muchos de sus alumnos que aún recuerdan sus clases como un prodigio de lucidez, rigor, agudeza, originalidad y apasionamiento ético. Es esa autoridad moral que nunca se tradujo en vasallaje sobre nadie, la que le valió el aprecio, la admiración y la amistad de muchas personas, en particular de algunos de los miembros históricos de nuestro departamento como Rafael Martínez Cortiña, Carlos Berzosa o Ángel Martínez González Tablas. Pero fueron muchos otros los que, sin llegar a conocerle personalmente o careciendo de un trato personal directo, se vieron seducidos o provocados por su manera de entender la economía y aceptaron formar parte de un colectivo minoritario en la profesión por fidelidad a la realidad y por sensibilidad sociopolítica. No es vacua la distinción entre el profesor y el maestro y de esto último estamos hablando al recordar hoy a José Luis.
Cuando el 29 de mayo de 1987 se jubiló el profesor Sampedro confesó que toda su labor universitaria había estado guiada por una frase que había escuchado, cuando era un joven estudiante, a un anciano y famoso profesor británico -Sir William Beveridge (el "padre" de la "Seguridad Social")-, durante una visita en la que le había acompañado por Madrid en el año 1945: "Life is serving, not enjoying". Esto es, la vida consiste en servir, no en disfrutar. Señaló entonces honradamente que no estaba orgulloso de haberlo conseguido, sino de haberlo intentado. Los miles de alumnos que pasaron por sus aulas, los que escucharon sus conferencias e, incluso, los "jóvenes indignados" que han alimentado su capacidad utópica en sus palabras y escritos más allá de toda frontera generacional, pueden hoy atestiguar que su vida ha servido para mucho. Más joven de espíritu que muchos de los que le sobrevivimos, era una chispa de alegría y optimismo en un mundo al que esas actitudes le faltan a raudales y por eso hoy somos muchos los que nos sentimos un poco huérfanos al constatar que una de las pequeñas luces que iluminaban las penumbras que nos rodean se ha apagado.
http://www.publico.es/453414/jose-luis-sampedro-un-metaeconomista-y-un-transprofesor
José Luis Sampedro fue pionero en la universidad española en la formulación y defensa del enfoque estructural para análisis económico. Una perspectiva de estudio de la realidad que subraya la existencia de profundos condicionantes técnicos y sociales que modulan el comportamiento de unos actores económicos reales que no operan como sugieren los manuales convencionales de economía. La existencia de rupturas y conflictos, de intereses e ideas contrapuestas, de grupos y clases sociales, de posiciones de mercado heterogéneas, de un acceso diferenciado al progreso técnico o de mediaciones políticas e institucionales que influyen en la actuación de todos los actores (empresarios, trabajadores ahorradores y consumidores) convierten a la economía "realmente existente" en una realidad social compleja y dinámica que la perspectiva estructuralista promovida por nuestro primer catedrático intenta captar en su integridad.
A Sampedro le gustaba autocalificarse como metaeconomista porque, como indicó en su memoria de oposición a cátedra y repitió en la memorable lección magistral que impartió con motivo de su jubilación: "Me dediqué a repasar la historia de la teoría económica y especialmente la obra de los "disidentes": los históricos, los institucionalistas, el marxismo, incluso los estructuralistas franceses que estaban entonces más de moda de lo que a mi juicio merecían". No es de extrañar que sus clases tuvieran el "sabor a realidad" y "sensibilidad humanista" propio de los autores clásicos de la economía política.
De ahí que su visión de la economía tuviera tres rasgos distintivos que no deberíamos perder quienes nos dedicamos a su docencia: el espíritu crítico, la visión amplia y la pasión por lo humano. No había en sus explicaciones cabida para la ingenuidad, el sectarismo ideológico o la asepsia tecnocrática. Pues si merece la pena estudiar economía no es para encontrar los mecanismos y tretas más astutos para enriquecerse a costa de los demás -lo que conduce al desastre colectivo como la crisis actual no deja de recordarnos-, sino para encontrar caminos que permitan a todos los seres humanos satisfacer adecuadamente sus necesidades básicas de un modo equitativo. A este respecto, José Luis Sampedro solía señalar con ironía que la Ciencia Económica había tomado un derrotero equivocado al haberse construido a partir del famoso libro de Adam Smith que -en su versión abreviada- se denomina La Riqueza de las Naciones, en lugar de haber partido de otro que se titulara hipotéticamente Investigación sobre la naturaleza y causa de la Pobreza de las Naciones y cómo superarla, dado que la pobreza es un problema mucho más serio y, por supuesto, más extendido que la riqueza.
Si he incorporado en el título este breve escrito de homenaje el neologismo transprofesor aunque él no lo utilizara nunca es porque también su magisterio fue más allá de lo ordinario. Y no porque creara un grupo de discípulos definido y llevara a cabo una estrategia tendente a ampliar su influencia académica o doctrinal -algo que no iba con su espíritu quijotesco-, sino porque su talante humano e intelectual inspiró, en el mejor de los sentidos, a muchos de sus alumnos que aún recuerdan sus clases como un prodigio de lucidez, rigor, agudeza, originalidad y apasionamiento ético. Es esa autoridad moral que nunca se tradujo en vasallaje sobre nadie, la que le valió el aprecio, la admiración y la amistad de muchas personas, en particular de algunos de los miembros históricos de nuestro departamento como Rafael Martínez Cortiña, Carlos Berzosa o Ángel Martínez González Tablas. Pero fueron muchos otros los que, sin llegar a conocerle personalmente o careciendo de un trato personal directo, se vieron seducidos o provocados por su manera de entender la economía y aceptaron formar parte de un colectivo minoritario en la profesión por fidelidad a la realidad y por sensibilidad sociopolítica. No es vacua la distinción entre el profesor y el maestro y de esto último estamos hablando al recordar hoy a José Luis.
Cuando el 29 de mayo de 1987 se jubiló el profesor Sampedro confesó que toda su labor universitaria había estado guiada por una frase que había escuchado, cuando era un joven estudiante, a un anciano y famoso profesor británico -Sir William Beveridge (el "padre" de la "Seguridad Social")-, durante una visita en la que le había acompañado por Madrid en el año 1945: "Life is serving, not enjoying". Esto es, la vida consiste en servir, no en disfrutar. Señaló entonces honradamente que no estaba orgulloso de haberlo conseguido, sino de haberlo intentado. Los miles de alumnos que pasaron por sus aulas, los que escucharon sus conferencias e, incluso, los "jóvenes indignados" que han alimentado su capacidad utópica en sus palabras y escritos más allá de toda frontera generacional, pueden hoy atestiguar que su vida ha servido para mucho. Más joven de espíritu que muchos de los que le sobrevivimos, era una chispa de alegría y optimismo en un mundo al que esas actitudes le faltan a raudales y por eso hoy somos muchos los que nos sentimos un poco huérfanos al constatar que una de las pequeñas luces que iluminaban las penumbras que nos rodean se ha apagado.
http://www.publico.es/453414/jose-luis-sampedro-un-metaeconomista-y-un-transprofesor
8/4/13
El Museo Salvador Victoria de Rubielos de Mora, cumple diez años.
El Museo Salvador Victoria cumple diez años de logros. Desde que abrió sus puertas en mayo del año 2003 ha conseguido atraer hasta la comarca de Gúdar-Javalambre y, en concreto, a Rubielos de Mora, a expertos y grandes aficionados al arte contemporáneo que, de otra forma, tal vez no hubieran recalado en Teruel.
Sin embargo, aunque ya está plenamente consolidado y ha demostrado en este tiempo que sus exposiciones tanto temporales como permanentes tienen mucho tirón, ahora está atravesando un momento económico delicado que podría incluso poner en riesgo el calendario previsto para este año.
El centro expositivo ha planteado un programa con varias exposiciones temporales, un concierto, una charla y un seminario sobre la importancia de los museos de arte en el medio rural. Pero para todo ello necesita un total de 60.000 euros y de momento solo ha logrado captar 12.000, que proceden del Gobierno de Aragón.
Texto: M. Cruz Aguilar • Teruel mcaguilar@diariodeteruel.net
http://www.diariodeteruel.es/comarcas/30768-el-salvador-victoria-condiciona-su-programa-a-la-obtencion-de-fondos.html
Sin embargo, aunque ya está plenamente consolidado y ha demostrado en este tiempo que sus exposiciones tanto temporales como permanentes tienen mucho tirón, ahora está atravesando un momento económico delicado que podría incluso poner en riesgo el calendario previsto para este año.
El centro expositivo ha planteado un programa con varias exposiciones temporales, un concierto, una charla y un seminario sobre la importancia de los museos de arte en el medio rural. Pero para todo ello necesita un total de 60.000 euros y de momento solo ha logrado captar 12.000, que proceden del Gobierno de Aragón.
Texto: M. Cruz Aguilar • Teruel mcaguilar@diariodeteruel.net
http://www.diariodeteruel.es/comarcas/30768-el-salvador-victoria-condiciona-su-programa-a-la-obtencion-de-fondos.html
La primavera llena de libros libres la Sierra de Albarracín
Se trata de liberar libros para que, quien los encuentre, que los lea y luego vuelva a dejarlos en un sitio público para que otras personas puedan disfrutarlo. La iniciativa ha sido planteada por la Asociación de Mujeres Caranjaina, que opera en la Sierra de Albarracín y que as su vez tomó la idea del Club de los Libros Perdidos, un grupo latinoamericano que opera a través de Facebook que planteaba hacer una liberación coincidiendo con la entrada de la primavera. De momento la actividad está siendo un éxito y se calcula que se han depositado en diversos pueblos de la serranía en torno a una treintena de libros.
“Es una manera de animar a la lectura tanto a niños como adultos”, comenta Nuria Valcárcel que es, junto con Begoña Sierra, la promotora de esta iniciativa cultural. Así, entre los libros que se pueden encontrar en repisas, árboles o junto a estufas de edificios públicos, los hay para público infantil y adulto.
De momento se han sumado a la iniciativa las localidades de Orihuela del Tremedal, Albarracín, Tramacastilla, Terriente, Torres, Moscardón, pero la idea es seguir liberando libros en cada estación, “porque no es lo mismo un libro para el otoño que uno para el verano”, aclaran desde el Club de los Libros Perdidos en Facebook.
Pero la liberación de las novelas es también una forma de demostrar a los más pequeños que la lectura es un juego de lo más entretenido. Así, algunas de las obras se han dejado en lugares muy a la vista, pero otras se han escondido para crear un juego de búsqueda destinado principalmente a los más pequeños.
Texto. Mari cruz del diario de Teruel.
http://www.diariodeteruel.es/cultura/30605-la-primavera-llena-de-libros-libres-la-sierra-de-albarracin.html?fb_action_ids=514703238566568&fb_action_types=og.likes&fb_source=other_multiline&action_object_map=[176641735818920]&action_type_map=[%22og.likes%22]&action_ref_map=[]